martes, 26 de marzo de 2013

SOBRE LAS ESPALDAS DEL CONTRIBUYENTE


Dice un viejo proverbio que sabemos calcular la resistencia de un puente, pero no lo que puede aguantar la espalda de un hombre. Y aquí, en este país de nuestros males, desvelos y lejanas esperanzas,  un ministro nefasto apellidado Montoro parece empeñado en doblárselas a los contribuyentes hasta comprobar su máximo grado de endeblez ante el ominoso peso que provoca el mantenimiento de eso que sarcásticamente llaman el estado del bienestar.

El falso estado del bienestar

¿De qué bienestar hablan?  Pues del que ellos mismos se brindan. A saber: las subvenciones a los partidos, sindicatos, patronales, fundaciones amigas y distintas organizaciones e instituciones mantenidos y mantenidas para albergar en sus orondas tragaderas a todos sus parásitos. Además de a los propios representantes de los ciudadanos en sus distintas variantes. Circula por ahí una lista que desmenuza uno por uno todos los entes y demás familia con una cifra que rebasa los 450.000 ‘mamandurriados’ en su conjunto. Y dan como referencia una comparación tan escandalosa como vergonzante: son el doble que en Alemania; compruébenla. Y reconozco que era de los que dudaban razonablemente de tal cifra por exagerada, pero cuando he mirado los detalles que aporta con detenimiento mi perplejidad ha corrido paralela a mi disgusto y desesperanza.

No nos engañemos, mientras que no se corte de raíz esa sangría no tenemos salida. Por eso soy de los que también opinan que con los que ahora nos gobiernan o aspiran a ello, todos ellos cancerberos y guardianes de tal estado de despilfarro, nuestro futuro va del negrísimo al inexistente.

Y unos y otros se escudan en la sanidad y la educación como destinatarios básicos de los recursos que nos sangran y, además, hacen objeto de los recortes a tales partidas del presupuesto del Estado porque les falta valor, coraje y todo lo que ustedes quieran para afrontar de verdad la necesaria poda del sistema.

Saber y querer podar

Se dice en la sabiduría agrícola que para podar cualquier planta hay que tener en cuenta varios factores básicos: lo primero ponerse con buen ánimo frente a ella con unas buenas tijeras y un serrucho afilado; lo segundo, antes de cortar nada, pensar que la rama que dejes seca en la planta nunca echará fruto; a continuación, que la que cortes tampoco; y, finalmente, que de dos que se crucen y estorben hay que cortar una, justamente la que se vea con menos asomos de crecimiento sano. Luego hay que recoger los restos cuidadosamente y llevarlos a lugar seguro para aprovecharlos en otros menesteres o destruirlos para evitar incendios y contagios de plagas futuras. De esa manera y por ese orden podas lo que te pongan por delante aunque no lo hayas hecho nunca. Pero hay algo que sí debes saber de antemano, y es que nunca debes cortar por la primera cruz, pues de ahí, de donde se hizo el injerto primitivo,  nace todo y si lo haces te cargas la planta.

Cosa que seguramente desconocen el nefando Montoro y sus secuaces, empeñados en dejar seca la ubre de donde mana el alimento fundamental: los bolsillos de quienes aún viven sin respiración asistida; los indefensos contribuyentes a los que todavía se les puede sacar algo.

La última ocurrencia

Lo último, en ese sentido, ha sido la falaz idea de gravar todavía más los depósitos de los ahorradores con el lubricante de que eso lo pagarán los bancos. ¿De verdad nos toman por idiotas? Pero vamos a ver, lumbreras de cafetín o atracadores de guante blanco, ¿alguien se puede creer que los banqueros van a cargar en sus desmochadas cuentas de resultados tamaño dispendio? Algunas veces dan ganas de darles en la cabeza con lo primero que se encuentre a mano a estos incalificables – por no desvariar desbarrando- sujetos, individuos, ‘mierdasenbrazos’ o como demonios queramos llamarles. Porque lo peor no es que nos sangren alevosamente para seguir manteniendo la inasumible ruina que entre unos y otros han propiciado en España, con ser ello un latrocinio criminal, sino que además lo hagan llamándonos tontos en la cara. Esto sí que no tiene nombre, porque sería para echarse al monte a continuación.

Así que embisten contra todo el que huela a tener algo guardado, producto, normalmente, de años y años de trabajo y esfuerzo. Y, además, también empitonan a quienes se atrevan a iniciar alguna actividad económica o la continúan, despreciando su heroicidad en estos tiempos que nos asolan manteniendo empresas, pagando tasas, impuestos, conservando y creando puestos de trabajo, etc.

En fin, que como falta lo que hay que tener para coger el toro por los cuernos, se dedican a machacar manu militari a quienes tienen en sus manos, vía BOE y demás resortes de poder. Nuevas tasas, aumentos de las anteriores, nuevos impuestos, subida de los existentes, inspecciones por todo y para todo con inexorable sanción económica final, y vengan palos a las ruedas de lo que aún funciona. Y así, tan lamentable como ignominiosamente, nos vamos al hoyo sin remedio.

Una sugerencia a D. Mariano

¡Ay Mariano, Mariano! , porque el responsable último eres tú, con lo bien que estabas entre bambalinas y riendo socarrón con el Marca bajo el brazo. El que te puso ahí, en la línea de salida para que me entiendas, que vaya ojo tuvo también; ya anda tirándote del ronzal para que vayas rectificando en diversos temas. ¡Sí, sí, el mismísimo Aznar! ¡Anda! , hazle un poquito de caso y sé un ‘bien mandao’, como siempre. Y, en cuanto puedas, haz un honroso mutis por el foro, ¡que ya está bien, hombre! Que ya está bien...     

lunes, 25 de marzo de 2013

ROSELL ES A MOURINHO LO QUE IDIOTEZ A TONTINHO


Por si no teníamos poco con las  ocurrencias de Mourinho aparece el presidente del Barsa con la bandera idiomática por montera; éramos pocos y parió la burra.

Rosell y Laporta

Ahora resulta, según Rosell, que hablar catalán es la mejor manera de ser del Barsa. Bórrense de culés quienes desde cualquier rincón de España o del mundo sientan los colores blaugranas. Como decimos en la huerta, se necesita ser tonto para decir una tontuna tan grande. Es decir, que los parlantes catalanes son todos del Barsa, o deberían serlo. Y quienes no parlem están en el purgatorio, como aquellos niños que por no ser bautizados les decían ‘moricos’. Yo no sé lo que tendrá la poltrona del Camp Nou, pero es difícil encontrar dos especímenes tan desmochados consecutivos en ninguna otra. De Laporta a Rosell y desbarro porque me toca. El primero desperdició el gran bagaje deportivo cosechado, y el prestigio personal que lo podía haber supuesto,  y aprovechó el cargo para dar el salto a la política tirándose a una piscina sin agua con el lamentable ‘hostión’ consiguiente; resultados cantan. Y el segundo lleva el mismo camino, aunque es difícil que supere el excelso grado de idiocia de su antecesor. ¡Con lo bonicos que estarían disfrutando y luciéndose orgullosos con el juego y los resultados del equipo que presiden!

Pero el consuelo de muchos buenos barcelonistas es Mourinho. Tal vez por los años en que lo tuvieron  amamantado con biberón en la ciudad condal personajes parecidos a los anteriores, el luso saltarín no pierde ocasión de dar la nota tonta de la semana. Y cuando no es con sus futbolistas la toma como todo lo que suene a español. Su absurda fijación con los éxitos de nuestro fútbol y de los personajes que lo integran es paralela a la  tremenda frustración que tiene por no ser la salsa de todos los parabienes del mundo futbolístico. Y todo ello es producto de un mal disimulado complejo de inferioridad que se acrecienta por su consabido narcisismo.

Dice el de Setúbal que es muy difícil ser portugués en España. ¡Mira ver, Maribel! Lo que es difícil en cualquier sitio del mundo es opositar a tonto, demostrarlo y que no se note. Pero vamos a ver, hombre, está usted en uno de los mejores clubes de España y del mundo, por no decir el mejor; tiene más poder que ha tenido en él nadie en su historia y le han traído a los jugadores que ha pedido, salvo alguna discutible petición; cogió una plantilla extraordinaria a su llegada y goza del aprecio de una parte considerable de su afición; aunque menos de las que debería, ha ganado algunas cosas en los tres años que lleva; hasta ahora le han respaldado sus dirigentes, y sigue usted saliéndose del tiesto cada dos por tres. ¿Pero qué quiere más? Si lo más fácil en su posición es ser elegante, educado, generoso y magnánimo con todo el mundo, ¿por qué se empeña en topar semana sí y semana también contra todo lo que no sea de su cuerda? Algunos lo tenemos muy claro: no puede remediar tener celos de cualquier otro que consiga algún éxito que a usted se le resista. Pues lo lleva claro, porque para llegar a tener la categoría personal y profesional de un Vicente Del Bosque, por ejemplo, por no hablar de su currículum como jugador – ya imposible- y como técnico – muy improbable- le faltan a este individuo muchas cosas; entre otras talante, además de talento. Su última perla ha sido denunciar que le han dado al español la distinción de mejor entrenador del mundo el año pasado quitándoselo, asegurando que le han llamado algunos votantes diciéndole que le habían votado a él y no al salmantino. Se ve que no ha leído al conde de Romanones cuando se lamentaba de que todos los académicos le habían asegurado el voto personalmente para entrar en la RAE y que luego sólo obtuvo el de quien lo apadrinó. Su famosa exclamación de ¡qué banda! se la podría haber copiado el portugués echándole inteligencia al asunto.  

Tal vez  el mejor consejo que deberían seguir los citados es aquel que alumbra que a veces es mejor hablar poco y pasar por tonto, que hacerlo en demasía y demostrarlo. 

Mientras, menos mal, los futbolistas de ambos equipos parece que se han entonado en el tramo final de la temporada. Que Dios reparta suertes y alumbre a algunos.               

martes, 19 de marzo de 2013

A PESAR DE ESTA BANDA


A PESAR DE ESTA BANDA, SALDREMOS ADELANTE.

Sí, a pesar de soportar al presidente más gris y rancio que ha dado nuestra democracia. Ése que llegó a la Moncloa por la confianza de los suyos y la esperanza de los que no, pero que en su desesperanza le vieron como clavo ardiendo donde agarrarse tras el tsunami Zapatero, y que acumuló más poder que nadie desde su paisano el general Franco dilapidando las expectativas que despertó en poco más de un año.

A pesar, también,  de sufrir al líder de la oposición más oscuro y sospechoso de todo lo imaginable - nada bueno, claro – que ha pasado por el Parlamento nacional desde la entronización de D. Juan Carlos, y que cuenta sus distintas etapas de poder por otros tantos escándalos a los que ha ido poniendo sordina desde el mando, pero dejándose tantos pelos en la gatera como descrédito en la ciudadanía.

A pesar, para colmo, del escaso relieve político de los demás jefes de los partidos que pueblan, o despueblan, el Congreso de los muditos o ese panteón de hombres pretendidamente ilustres que es el Senado, si los comparamos con quienes los ocupaban en los primeros años de la esperanzadora democracia que nos dimos todos, ahora devenida en una desacreditada y lamentable partitocracia.

Y, finalmente, a pesar de todo lo demás que les rodea desde las instituciones que supuestamente debían ser pilares básicos de nuestro sistema político, y que antes o después de aquellos, por desméritos propios o asimilados de los estrictamente políticos que los pastorean, o por llevar el virus de los despropósitos en su propio seno; han caído en la misma mediocridad, ineficiencia, ineficacia o poca vergüenza, haciéndose acreedores de la consiguiente desconfianza de la ciudadanía.

La genética de un pueblo

A pesar de todo ello, les quería decir, saldremos adelante. Y será así porque la fuerza generatriz de un pueblo, como el español, tiene en sus genes sus propias fuentes de alimentación. La historia nos avala.

Un pueblo que ha tirado hacia adelante durante siglos a pesar de las nefastas monarquías sucesivas que liquidaron el imperio español, enredándose en afanes ajenos a los españoles, con el nefando colofón del reinado de Fernando VII que traicionó a todos e impidió la modernidad liberal en España originando a la postre tres guerras civiles en el XIX. O el de Alfonso XIII,  que por sus clamorosos errores, indecisiones, ambigüedades e irresponsabilidades propició el caldo de cultivo de la sangrienta Guerra Civil del 36.

Y que también soportó la disgregadora I República, abortada, y la nefasta II, en casi todos los sentidos, que acabó enfrentando a media España con la otra mitad porque no supieron sus políticos hacer un régimen donde cupiesen todos los españoles por culpa de  sucesivas legislaciones hechas contra sectores considerables de la población.

Y que soportó tan estoica como resignadamente un régimen personal y populista, con etapas de dictadura y ‘dictablanda’ durante casi cuarenta años, porque al menos le garantizaba una paz social a la que estaba desacostumbrado.

Los españoles y el general tiempo

Un pueblo así, les decía, lleva en su genética el antivirus de la profunda depresión destructora. España saldrá adelante porque sus ciudadanos siempre estarán por encima de las circunstancias que la coronen, la mangoneen o traten de conducirla al sumidero de la historia. Y miren que muchos lo han intentado. Los que fueron y los que no; los citados, los sugeridos, los evidentes y los sobreentendidos. España ha salido siempre adelante a pesar de ese desfile de personajes tan poco recomendables en su historia. Y saldrá también adelante a pesar de la banda de incalificables, por no ser muy cruel en los calificativos, que ahora nos representa y desgobierna.

Y ha sido y será así porque siempre ha habido y hay hombres y mujeres con la valía y el coraje suficientes para superar todas las dificultades y encaramarse al tren de su camino impidiendo el desastre. Empezando por los millones que luchan denodadamente día a día para sacar a sus familias y empresas adelante desde el anonimato, y siguiendo por algunos, que los hay, que aun estando dentro del sistema que nos arruina tratan de enderezar la nave denunciando los desmanes que contemplan y peleando por limpiar las instituciones en las que están, por el bien de todos.

Salen pocos, pero yo creo, a pesar de mi desesperanza muchas veces, que son más de los que parecen, porque se me antoja improbable que haya tanto cenutrio y golfos juntos. Más bien soy de la opinión de que la tiranía de los núcleos de poder de partidos e instituciones no les deja respirar. Pero dejemos obrar al general tiempo. El agua siempre va a lo hondo sin pedir escrituras. Y la opinión generalizada del pueblo español respecto a la situación que padecemos es imparable.

Los cambios que casi todos pensamos

Los cambios que están en la mente de todos acabarán por hacerse realidad. Algunos de ellos los expusimos en la colaboración de la semana pasada, y otros muchos se describen en multitud de artículos y opiniones diariamente en los medios de comunicación y en las redes sociales. Le pese a quien le pese y en cuanto a ese general infalible le llegue su momento. Sólo es cuestión de tiempo. Y quienes ahora se agarran a sus poltronas también lo saben.

Generar ilusión y un Papa

A los demás nos toca empujar del carro cada uno  como pueda. E ir creando ilusión desde el más desgarrador desánimo viendo lo que vemos todos los días. Esto de meternos ilusión en vena es más importante de lo que creemos. Y transmitirla. Porque juntos en ese empeño saldremos adelante.

PAPA FRANCISCO I

A ver si con el nuevo Papa vienen tiempos mejores. A Roma parece que ya ha llegado el general que antes les decía: su tiempo, con una dimisión y un Francisco. Aquí nos conformaríamos con un Paquito. O, si son pequeños, con dos pero que tuvieran un par muy grande de lo que fuera.  Mucho ánimo.


lunes, 18 de marzo de 2013

MESSI


MESSI & CRISTIANO;  EL DEBATE ENTRE FOROFOS

Si escuchas a miles de aficionados madridistas resulta que sin Messi el Barsa no sería lo que es; y es verdad.

LEO MESSI

Lo que ocurre es que el enorme jugador argentino, hecho en la cantera blaugrana, tampoco sería quien es si no tuviera la compaña de los Xavi, Iniesta y demás portentosos futbolistas del Barcelona. Y, tampoco, sin un técnico como Guardiola que le dio los galones largando a quienes hubieran podido eclipsarle por la indiscutible calidad que atesoraban, o, al menos, retrasar su fantástica eclosión futbolística mundial. Me refiero a los Deco, Ronaldinho, Eto’o, y posteriormente Ibrahimovic. A los primeros los vio a la primera, valga la redundancia, y eran heredados. Al segundo lo fichó el Barsa estando ya él en el banquillo y decidió traspasarlo en cuanto le vio el pampaneo. A Messi lo tenían  jugando en la banda derecha y D. Pep vio claro que  a una estrella de esa envergadura hay que darle todo el firmamento para que luzca; no es jugador de esquinas, sino de frontal. Fue en un clásico Madrid-Barsa de liga donde le dejó el de Sanpedor libertad para moverse por cualquier sitio del ataque, preferentemente desde la derecha hacia el centro.   Y ahí empezó a consolidar lo que ya apuntaba, pero que a saber lo que hubiera pasado con el argentino pequeñito en unos años de no mediar la sabiduría de Guardiola. Muchas veces, decisiones de quienes tienen la responsabilidad de dirigir marcan la vida de personas que con el tiempo escalan en solitario la gran pirámide del mundo. Y, sin embargo, pocos se acuerdan con el tiempo de quien marcó de verdad su destino con una elección clave.

Para reafirmar lo anterior, sólo hay que ver la diferencia entre el Messi de la selección argentina y el del Barsa. Ahora ya se va igualando; en cuanto le han puesto a jugar como en el Barsa; pero todavía no le llega ni a su propia cintura blaugrana. Recuerdo cuando al principio la propia afición argentina no le tragaba porque le recriminaban que no era el mismo que veían en su club. Pero claro, tampoco tenía los mismos compañeros: Verón no ha sido nunca Iniesta, por ejemplo. Ni ningún medio centro albiceleste Busquets, ni organizador alguno Xavi, por supuesto.

Pero en último extremo, y para contradecir a los forofos madridistas que  pretenden ningunear al resto de jugadores culés, hay que añadir que, quitando a Messi, en su equipo queda bastante más de media selección española que es campeona del mundo y doble campeona de Europa, consecutivamente. Y eso es lo que le da de verdad la credibilidad y el marchamo de excelencia al Barcelona. Esos futbolistas y ese estilo de juego son la causa que ha encumbrado tanto a los blaugranas como a nuestra selección a la gloria mundialmente reconocida de ser los dos mejores equipos del mundo desde hace más de un lustro; y con España no juega Messi, que yo sepa.  Los demás, como diría mi abuelo, son cuentos.

Por el contrario, sería más ajustado a la realidad asegurar que sin Cristiano Ronaldo el Madrid sería un equipo mediocre tanto en juego como en resultados. Y eso que cuenta con la plantilla más cara de su historia y el técnico que ha acaparado más poder que ninguno de sus predecesores. Y eso ocurre por dos circunstancias tan indiscutibles objetivamente como olvidadas por los propios forofos blancos y por muchos profesionales del fútbol  y de la pluma, la cámara o la alcachofa. Y es que tras el astro portugués, que para mí es el mejor goleador que ha pasado por el Madrid, sólo hay muy buenas individualidades, como los Casillas, Ramos o Alonso, también campeones de todo con España,  o algunos internacionales de otros países.  Pero ni hay estilo reconocible de juego, ni viene ninguna generación de grandes futbolistas detrás con los mismos criterios de juego que los primeros, ni estrategia técnica alguna elaborada desde su dirección técnica. Todo se basa en balones largos hacia adelante para que la enganche Cristiano, o alguno de sus ayudantes en el campo que se la pasen, y que la enchufe.  Lo único malo que tiene el portugués para los actuales dirigentes blancos es que no le fichó ni Florentino Pérez, aunque le hizo una presentación de cine, ni Don Mourinho, que ya se lo encontró allí. Lo hizo el defenestrado Ramón Calderón. Y todo los demás también son cuentos.

Disfrutemos a ambos mientas podamos.         


miércoles, 13 de marzo de 2013

QUÉ BUEN MOMENTO PARA UN CAMBIO REGENERADOR


IDEAS PARA UN CAMBIO REGENERADOR

A veces, puesto a pensar sobre las soluciones que tanto se reclaman a quienes alguna vez criticamos el sistema, se me ocurren cosas. Y alguna hemos expuesto desde este blog. Pero la que más me ha gustado fue la de un sueño que tuve una siesta de estas.

Una reunión imprescindible

RAJOY - RUBALCABA

Fue un duermevela lúcido que recuerdo más o menos así. Resultaba que Rajoy y Rubalcaba habían decidido ser estadistas de una vez y se habían reunido para arreglar el asunto de España. Y, al acabar, salieron juramentados en coger el toro por los cuernos y dar la batalla del futuro de verdad. Habían acordado dejarse de reproches y de refriegas estériles y hacer un grupo de trabajo conjunto que hallara  soluciones a  los problemas que nos acucian.

Un grupo de héroes

Puestos a la obra, designaron a algunos de sus colaboradores más preclaros y a personalidades relevantes de éxitos reales medidos en diferentes sectores del panorama nacional que no tuvieran nada que ver con ambos partidos. Incluso buscaron algunos asesores internacionales de prestigio indiscutible, sin cargas ideológicas redentoras de nada,  para que ayudaran en la metodología y contribuyeran a la mayor efectividad del grupo sin ostentar voto en sus conclusiones. Y así, tras un periodo razonable de tiempo, este grupo dictaminó lo siguiente:

Algunas conclusiones, no excluyentes

-   Reformar el sistema electoral para que se cumpliera de verdad lo de una persona un voto, lo mismo uno de un partido nacionalista en cualquier región que  otro en el lugar más remoto de España, y estableciendo listas abiertas en todas las ocasiones.

-   Que ningún cargo electo ganara más en sus responsabilidades políticas que lo que ganara con su trabajo habitual. Salvo los máximos ejecutivos y con limitación de tiempo en el puesto.

-  Que todos los componentes de los diversos órganos del poder judicial fuesen elegidos únicamente por los juristas profesionales en sus diferentes especialidades.

-   Suprimir la palabra subvención de todos los presupuestos públicos, salvo para los programas de asistencia social a personas dependientes sin recursos.

- Suprimir todas las sociedades y fundaciones públicas elevando el nivel, la responsabilidad y el trabajo del funcionariado. Quitando también el carácter vitalicio de los empleados públicos y retribuyéndoles según su productividad real.

-  Que sólo tengan carácter de empleados públicos profesionales específicos en cada una de sus funciones, subcontratando con empresas privadas todo el trabajo auxiliar de la Administración, y que ningún empleado público pudiera ser removido de sus funciones por ningún poder político desde el tercer nivel de los mismos hacia abajo. Es decir, que sólo pudieran ser nombrados a dedo por la confianza de los ministros,  alcaldes o presidentes de Comunidades Autónomas, sus segundos.

- Que tanto los partidos políticos como los sindicatos, y todo tipo de organizaciones empresariales y de la llamada sociedad civil, se nutrieran única y exclusivamente de las cuotas de sus afiliados o de donaciones privadas debidamente acreditadas y con total transparencia.

-  Endurecimiento al máximo nivel de pena en el Código correspondiente de cualquier atisbo de corrupción, tanto para el corrompido como para quien corrompa.

-   Supresión del Senado quedando únicamente como una Cámara de representación territorial donde los diputados regionales pudieran reunirse ocasionalmente para analizar y proponer al Congreso leyes nacionales que les pudieran afectar con el fin de homogeneizar en todo el Estado aquellas que regulan actividades suprarregionales.

-  Endurecimiento del Código Penal de modo que se acabara con el lamentable espectáculo de delincuentes, organizados o no, que entran y salen de prisión, o ni llegan a entrar, con multitud de delitos cometidos reincidentemente.

-  Dotar a la  Justicia de los medios humanos y métodos de gestión más modernos con el fin de agilizar su administración.

- Proteger el desempleo sólo hasta que se encuentre un solo trabajo del nivel solicitado en un radio geográfico adecuado y razonable.

-  Elección libre de atención médica y sanitaria por parte de los contribuyentes reales al sistema de protección pública.

-  Hacer competitivos en el mercado todos los centros sanitarios y educativos públicos, garantizando el actual estado asistencial pero fijando su mantenimiento con cargo a los Presupuestos de acuerdo con sus respectivas productividades y logros en investigación, innovación y resultados sanitarios y académicos medibles obtenidos periódicamente. A salvo de tal discriminación quedarían únicamente los dedicados a la atención de quienes no pueden valerse por sus propios medios por las circunstancias que fueren.    

- Reducción importante de políticos retribuidos de los ciudadanos en todos los ámbitos de la Administración, así como de los Órganos de los mismos: concejales, diputados, ayuntamientos, etc.

-  Reformar la Constitución en cuanto fuera necesario para todo ello.

Emprendedores y bancos

Y el colmo de la dicha fue creerme el sueño durante unos minutos imaginando una nación renacida al vuelo de tales acontecimientos, en la que  cualquier emprendedor de lo que fuera  tuviera a su disposición un servidor público, o varios, para desembrozarle el camino administrativo, en lugar de tres o cuatro matachines viendo cómo hacer embutidos con sus logros y desvelos para mantener el sistema derrochador y corrupto que nos ahoga.

Y que los bancos se dedicaban a financiar sin abusos ni usuras y no a malmeter en cuantos negocios huelen sus lumbreras.

Un buen momento para un cambio regenerador

Y después de un largo etcétera que ya no recuerdo bien, me desperté con la ilusión de que Rajoy y Rubalcaba habían convenido retirarse de la vida pública, junto con sus compañeros de generación, dando paso a las siguientes generaciones sin pesadas mochilas generadoras de todo tipo de desconfianzas en la ciudadanía. Igual que resto de mandamases autonómicos, municipales, y gerifaltes sindicales, empresariales y de la llamada sociedad civil envueltos en situaciones escandalosas.

El ‘recopetín’ fue cuando creí escuchar en una radio que el Rey había abdicado en su hijo.

Y que en España se volvía a sonreír.

Es el momento ideal por todo lo que nos rodea. Imagínenlo.

lunes, 11 de marzo de 2013

LAS APARIENCIAS ESTRATÉGICAS DE MOURINHO


Por primera vez desde que está en el Madrid he escuchado algo elegante de Mourinho respecto al rival; o, al menos, no recuerdo otra.  Me refiero a lo que dijo al acabar el partido de vuelta frente al Manchester: “hoy ha perdido quien fue mejor”. Reconozco que mi primera impresión fue la de otorgarle el beneficio de la sensatez, si es que así lo vio él. Pero después, recordando el macuto de este señor desde que le sigo, me dije a mí mismo que un egocéntrico empedernido como el luso no cambia de la noche a la mañana por un súbito arranque de modestia. Y, también, que jugando con su inteligencia emocional, de la que indudablemente está bien dotado, hizo una carambola a cuatro bandas.

MOURINHO

Me explico. Por un lado dejó la impresión inicial que yo tuve, cosa que nunca viene mal cuando se gana algo con mucho esfuerzo y se reconoce  la valía del contrario, resaltando, así, la importancia de lo conseguido    echándole de paso un capote benevolente al vencido. Eso siempre es tan elegante como inteligente.

Por otro, le dio un pescozón a sus muchachos por la indolencia mostrada en muchas fases del partido, sobre todo en la primera parte, con el fin de que sean conscientes de que aún no han ganado nada y que hay que espabilar para salir campeones de esa competición y en la otra.  ¡Ojo al Atlético! Esto tampoco viene mal cuando se dirige a un grupo tan complicado como  el vestuario de un gran equipo de cualquier cosa. Los egos hay que amainarlos un poco para que no se tornen tormentosos cuando crecen con desmesura.

La carambola mala es la  sempiterna lucha con los medios de comunicación españoles y con la opinión de una legión cada vez más numerosa  de aficionados que, aunque tardaron demasiado en cogerle la matrícula, al fin se percataron de su narcisismo galopante y demasiadas veces mal educado. A ellos quería darles en la cara en tierra extranjera, para él muy querida, por cierto, y vender la moto de que también sabe respetar al adversario y que no es tan egoísta como muchos pensamos en España. Una jugada infantiloide de desprecio supino para quienes no comulgan con su forma de dirigir a los blancos ni se han dejado evangelizar por su pretendida sapiencia futbolística; absurda prepotencia de quien no ha sabido estar nunca a la altura del Real Madrid en ninguno de sus aspectos.

Y la cuarta y regular está bien clara: la mercenaria. Y es lógica si cree que el final de la temporada marcará también su final en el Bernabéu. O, en todo caso, buscando novias para subir su caché en el club de Concha Espina y pasarle a D. Florentino la factura correspondiente a su ambigua posición respecto de él en los últimos meses, si, a la postre, deciden que continúe de conseguir la Décima. En la Premier habrán tomado buena nota de su buena educación deportiva aparente, y muy inteligente por su parte, y no tardarán en ofrecerle suculentas ofertas; ¿por qué no el mismo Manchester? Hay que reconocerle viveza en estas lides. Partiendo de la base de su profesionalismo esto no es nada criticable, aunque pueda doler a los forofos madridistas que le tienen ingenuamente por uno de los suyos. Eso a los pocos que piensen y se hayan percatado de la jugada, claro, en lugar de usar la cabeza para otros menesteres tan habituales en ellos.

Pasando al tema  deportivo hay que reconocer el mérito del Real Madrid superando los dos tremendos ‘rubicones’ que tenía por delante. No era nada sencillo, y en ello algo habrá tenido que ver el lusitano, aunque, a pesar de que ahora las críticas se le volverán elogios porque los resultados mandan, muchos pensamos que su aportación ha sido mínima.

El Barsa anda sin dirección técnica un par de meses largos  y eso se nota, como dijimos, en su rendimiento en el campo. Contra los blaugranas, la intensidad de juego la pusieron los jugadores blancos pasando por encima de los culés de largo. Y es que, calidad tienen de sobra para ello. Y contra los ingleses, a pesar de atacar más en ambos encuentros, se les apareció la Virgen de la Almudena en diversas ocasiones.  Ferguson no tuvo su mejor día en casa, aunque en ambos partidos la única estrategia fue la suya. El Madrid ganó a remolque.

Algo es algo, señor Mourinho; aunque a buenas horas… 

martes, 5 de marzo de 2013

UN ICEBERG LLAMADO ‘MENTIRAS’


Las mentiras mayúsculas que hoy asolan  España son poliédricas.  Tienen tantos lados como irregulares son para quienes deberían ser guía y ejemplo para todos, la desvergüenza, el cinismo, la deshonestidad, las corruptelas, la cobardía, la traición, el robo, el abuso de poder y las sevicias de todo tipo que cada día nos encontramos en el panorama nacional.

Y todas ellas juntas conforman un iceberg que amenaza con mucha certeza el precario buque en el que hoy se ha convertido España. Y lo hacen porque al frente de cada arista de ese inmenso bloque de miserias humanas hay unos personajes que vienen actuando así con premeditación, alevosía y desprecio de los ciudadanos que los mantienen. Y lo hacen con una irresponsabilidad tan sangrante que asusta, otorgándoles la segura continuidad de sus actos si nadie pone coto, y pronto, a tanto desmán.

El crisol de la pérdida de valores

La mentira ha acrisolado nuestra inmensa pérdida de valores desbancando a la envidia y al fútbol como deportes nacionales. Aquí todo el mundo sabe que todo el mundo miente – me refiero a los poderosos y a los menos – y hace tiempo que, para más inri, lo vemos con el prisma de la normalidad dentro de un sálvese quien pueda que ha llevado su descrédito y la desconfianza general a la inmensa mayoría de ciudadanos que ven cómo nadie se ocupa de verdad de los acuciantes problemas que les arruinan cada día. Dije que están dadas las circunstancias que en anteriores etapas de esta España de nuestros dolores propiciaban la aparición de un salvador ocasional que normalmente acababa en tragedia. Y he visto con cierta alarma personal que otros articulistas han abundado en ello desde distintos ángulos, por lo que me reafirmo en el peligro real que se cierne sobre nosotros. Sin ánimo excluyente, veamos algunos casos.

Andalucía

En el asunto de los ERE en Andalucía nadie cree a los gobernantes que proclaman  que ellos no sabían nada del atraco que supuso a los fondos públicos. Éstos, del PSOE, con la complicidad posterior de sus aliados comunistas.

Cataluña y Baleares  

En Cataluña pocos dudan del trinque institucionalizado que los nacionalistas de CIU instauraron desde el poder. Ni que sus apellidos más ilustres forman un conglomerado tan defraudador como corrupto desde hace tanto tiempo como memoria democrática tenemos. Incluso anterior. Y aquí han contado con la complicidad, si no connivencia, de sus rivales del PSC-PSOE, que alguna vez amagaron con sacarlo a la luz pública – Maragall dixit- y que se la envainaron para no destapar el baúl de la mierda, con perdón, en el que sin duda alguna también estaban ellos metidos; de lo contrario no se explica. Y también en este caso han contado con el indigno silencio del Tripartito, cómplice también, que cuando desgobernó no tiró de la manta con todas sus consecuencias, o que les vino muy bien por aquello de la continuidad de las golfas costumbres. Y en tan nefanda cama redonda política estaban los socialistas, los republicanos independentistas de Ezquerra y los comunistas ecológicos de IU Los Verdes; que éstos se apuntan con sus primos a cualquier  chollo aunque apeste. Miremos si no lo del desastroso lío a cinco bandas balear, donde no sólo desgobernaron a mansalva con socialistas, nacionalistas e independistas de todo pelaje, siguiendo su secular costumbre, sino que hicieron casi buena la etapa anterior del PP, que concluyó con su presidente encausado penalmente en cuarenta historias.

Valencia

En la Comunidad Valenciana, entre ‘gurteles’,  Cajas, aeropuertos, grandes premios, parques de atracciones   y obras que más parecieran fallas que creadoras de riqueza, también el PP ha pecado de los mismo. De esta querida región muchos pensamos  que lo que ha salido hasta ahora, como en tantas otras, es como la punta del iceberg; si se supiera toda la verdad veríamos el catálogo de mentiras que han echado exculpatoriamente  sus protagonistas.

PSOE

Del PSOE, ahora en la oposición, y del mandato de Zapatero y su vice Rubalcaba, qué podemos decir. Aparte de que protagonizaron el asombroso despropósito de laminarse en pocos años a las centenarias y benefactoras Cajas de Ahorros, con la ayuda de muchos ‘peperos’ y de otros ilustres, y el de hundir el país con  sus demás inventos, todos somos conscientes de lo que mintieron con el asunto de las negociaciones con ETA, en la negación de la crisis económica por interés electoral partidista, en el maloliente y todavía inconcluso Faisán, en las peonadas de su ministro de industria en gasolineras, o en el ya muy lejano - pero del que arranca casi todo-  asunto del 11M y su gestión política, policial y hasta judicial posterior. Eso de que todo fue obra de cuatro chalados musulmanes, luego oportunamente suicidados,  que hicieron un montaje tan espectacular que supuso un golpe de estado electoral, siendo algunos de ellos y otros supuestos cómplices confidentes de las fuerzas del orden, no se lo cree nadie que piense sin obedecer consignas.

PP

Y por fin llegamos al PP de Rajoy. La gran esperanza blanca de los desesperados españoles, quienes le otorgaron más poder que ha tenido nunca partido político alguno en la España supuestamente democrática, y que en un tiempo record han tirado por la borda su bagaje ilusionante mintiendo con su programa electoral y mintiendo ahora también a mansalva con el asunto Bárcenas. Este personaje los tiene por los blandos y se escucha por doquier el ruido navajero de quienes desde dentro no soportan que a base de mentiras se tire por la borda su honra.

Y los demás

Y ya, si miramos a la realeza y a tantas otras instituciones básicas del Estado, y menos básicas,  vemos cómo efectivamente el iceberg de las mentiras tiene demasiadas aristas afiladas para que el buque España pueda salvarse de ser empitonado y hundido.

O viene alguien, o ‘alguienes’, y dan un puñetazo en la mesa destapando y poniendo orden en este guirigay o se intuyen efemérides luctuosas, que diría el recordado Dr. Ripoll.           

lunes, 4 de marzo de 2013

SIN DIRECCIÓN NO HAY RUTA NI JUEGO


Hace dos semanas decíamos que sin alma no hay equipo ni juego refiriéndonos al Madrid. Ahora hay que decir lo que titulamos, respecto del Barsa.

Barsa

La cuerda de ese reloj casi perfecto está parada y no parece haber nadie que la cebe para que vuelva a dar sus horas como antaño. Lo vimos en Milán y en Barcelona, y esta jornada en Madrid. Hacen veinte o treinta minutos buenos que coinciden con el repliegue ordenado y de tanteo de sus rivales, jugando como solían, pero en cuanto el equipo contrario empieza a enseñar sus armas ofensivas, estudiadas precisamente para contrarrestar el archiconocido despliegue blaugrana, empiezan las carencias tácticas de un equipo con un diseño antiguo. Dicen algunos que resulta muy difícil mantener el altísimo nivel anterior de los últimos años, y es verdad, pero también que ninguna organización se puede mantener estática en un mundo dinámico. Sobre todo en un deporte donde todos los argumentos se exponen semana tras semana en uno o dos partidos. Los rivales analizan y estudian cómo contrarrestar el poderío exhibido y tarde o temprano dan con la tecla. Al Madrid le ha costado una docena larga de partidos cogerle en tranquillo a lo largo de varias temporadas, y al fin lo ha conseguido.

Los equipos que no innovan mientras el triunfo les sonríe corren el riesgo de morir de éxito, y eso le pasa al Barsa. Cuando lo dirigía Guardiola veíamos que de vez en cuando cambiaban tácticamente variando la posición de sus jugadores, en incluso la composición de sus líneas, sobre todo en defensa. Por eso nos asombrábamos de que a veces salieran con tres defensas en partidos importantes, y que incluso alguno de ellos fuera un medio reconvertido ocasionalmente. O que sentara a algún titular relevante sacando a chavales del filial a quien nadie conocía. Así iba variando sus estrategias de juego y, encima, espabilando a algunas vacas sagradas dándoles oportunidades a jóvenes que pronto deslumbraban con sus capacidades. Nada de eso sucede ahora.

Tito Vilanova asentó su dirección basándose en el legado recibido, e hizo muy bien, y también añadió algunas variantes de su cosecha, amarrando con más o menos éxito, pero desde su lamentable ausencia, que ojalá dure poco, el equipo vaga por el campo pretendiendo jugar como siempre y sin capacidad de reacción cuando el rival le golpea. Y vemos cómo sus estrellas y  veteranos se organizan a su aire sin más sentido de juego que tratar de sacarle provecho a sus indudables cualidades sin orden ni concierto. Aguantan los minutos que decíamos con las lecciones anteriores, pero enseguida se cansan y el individualismo sustituye al juego de conjunto. Y así vemos como Messi, por señalar al más significado, se transforma en el jugador que vemos con Argentina bajando al medio campo aparentemente para ayudar en la organización, pero enredándose en jugadas donde pretende driblar a media docena de contrarios para llegar con franquía al área. Es como si despreciara el aporte de sus compañeros mediocampistas erigiéndose en el salvador de un equipo que tiene su punto débil en que nadie desde el banquillo le dice que junto a las líneas de los sustos está su hábitat natural. Ni él puede hacer de Xavi o Iniesta ni ellos de puntas. Y cuando se deja de tonterías y está donde debe para recibir el pase oportuno de sus compañeros sigue haciendo goles, naturalmente.

En fin, el Barsa ganará la Liga gracias a la ventaja que obtuvo mientras que alguien le dirigía desde el banquillo, pero la Champions la tiene chunga salvo que alguna de sus portentosas individualidades tengan su día y enchufen tres o cuatro goles, que es lo que necesitarán ante el Milán.

Y el Madrid, por el contrario, con la misma dirección, halla el alma que les falta contra otros equipos cuando se enfrenta al Barsa. Y es que para estos encuentros poca mentalización hace falta. Mourinho no se transforma en el gran estratega que no es precisamente en estos partidos, porque si lo fuera no tendrían la Liga perdida desde la primera vuelta, sino que son los propios jugadores quienes sacan lo mejor que tienen frente al equipo que les ha quitado los laureles más relevantes en las últimas temporadas. Y da igual quienes jueguen, porque hay algo que es común en todos los deportistas: contra los considerados superiores la casta y el orgullo lucen casi tanto como la clase.  Máxime si  individualmente no son inferiores.        

viernes, 1 de marzo de 2013

COMO LAS OLAS

COMO LAS OLAS, UNOS VIENEN Y OTROS VAN



Rememorando aquella deliciosa habanera, ¡qué bonito es el fútbol!, casi como las olas del mar: “cuando voy en mi barquita, unas vienen y otras van”. Y es refrescante cuando nunca se puede asegurar nada, y muchos menos los resultados aun cuando se enfrenten dos equipos llamados a glorias diferentes. Además, en el peor de los casos, indefectiblemente  se cumple aquello de que no hay mal que cien años dure ni cuerpo que lo aguante.

LIGA ESPAÑOLA DE FUTBOL

Hemos tenido buena muestra de ello en la actual liga al embarrancar en playas menores algún gran crucero, como pasaba en las añoradas ligas con muchos de ellos en las desembocaduras de pequeños ríos que se crecían hasta sacarle los colores al más pintado. Era cuando aspiraban al título equipos que ahora están al borde de la desaparición, como el Depor, asfixiados por las deudas que han generado aquellas alegrías sin fundamento de base. Y otros, como el Villareal, no lo están por obra y gracia de sus mentores; hasta que se cansen de ponerlas, claro, porque encima les saquen pañuelos quienes van al campo a que le den pan y circo, o les critiquen con escasa memoria de los méritos antiguos los de la alcachofa o los de tecla fácil, que a veces son más rápidos que los gatilleros del viejo oeste. Y es que, para eso están, naturalmente. En todo caso, ningún lugar más abonado para pagar los pecados de la soberbia, la vanidad, la prepotencia, la osadía o la avaricia que el palco de un campo de fútbol cuando las cosas se tuercen, que sucede a menudo.

A propósito de lo anterior, el catedrático de economía Gay Liébana ha publicado un estudio en el que analiza la podredumbre de las entretelas de nuestro fútbol. Y ha venido a decir lo que tantas veces se ha comentado en muchos medios serios y hemos señalado alguna que otra en estas páginas. La huida hacia delante de la mayoría de equipos gastándose los ingresos futuros que producían las teles y todo tipo de publicidades varias les han hecho acumular deudas mastodónticas que terminarán con ellos a poco que las autoridades políticas dejen de mimar un sector del espectáculo que muchas veces ha hecho olvidar al ciudadano penurias más graves. Y ese momento parece que ha llegado. Ahora, cuando no es de recibo que a cualquiera le embarguen hasta las pestañas por deudas a Hacienda o a la Seguridad Social, sea persona física o jurídica, y que se publiquen los datos de numerosos clubes morosos con púas muy elevadas fichando o desfichando a diestro y siniestro como si tal cosa. El personal no traga con que a unos sí, a los normalitos, y a otros se les levante la mano por aquello de que se trate del deporte nacional. Y encima, el asunto de la caja tonta no parece que esté para muchos trotes y se anuncian días de vacas flacas. Todo llega, como en la vida.

Por otra parte, de lo azaroso de los resultados deportivos hemos tenido buena muestra en esta eliminatoria de Champions. Al Madrid se le atragantó el Manchester a pesar de jugar unos buenos veinte minutos en la primera parte, con algunos jugadores desconocidos para la mayoría que hicieron bueno aquello de que los nombres no hacen futbolistas buenos, ni hombres, claro. Y es que , la disciplina, como el rigor táctico, muchas veces da buenos frutos aunque también sea necesario para ello una buena dosis de suerte. Y si no que le pregunten al Barsa, quien dominó a mansalva, de una forma muy roma eso sí, y el Milán llegó tres veces y le hizo dos roscos. Con la ayuda de la suerte y del árbitro, también, pero los culés debían mirar primero que no tiraron con peligro ni una vez a puerta. El Málaga lo tendrá chungo, así como el Valencia. Pero bueno, demasiado han hecho con los problemas que acumulan.

Y decíamos que unos vienen y otros van. Afortunadamente el Madrid parece que pasará pronto la ignominiosa página del luso saltarín, que dejará más pena que gloria en lo deportivo y la imagen del club hecha unos zorros. El Barsa tiene el inquietante panorama de Villanova por delante, y bien que se notó en San Siro, donde no hubo alternativas a la falta de punch. Y los otros punteros de la liga andan enmendando planas. Ya veremos.

Ah!, y el Bayern alemán espera a Guardiola. ¡Albricias!                
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
Web Analytics